Málaga, 3 jul (EFE).- El centrocampista Adrián González dijo este lunes, en su presentación como jugador malaguista para las próximas tres campañas y una más opcional, que «desde fuera siempre» ha visto «con admiración al Málaga» y que el reto debe ser «mejorar» y seguir creciendo, aunque «sería positivo quedar entre los diez primeros».
Adrián, que llega libre tras dos años en el Eibar, se incorpora al equipo que entrena su padre, José Miguel González ‘Michel’, y afirmó que el Málaga «es uno de los clubes bonitos de esta Liga» y que en la entidad malaguista «mostraron mucho interés», algo que fue «otra de las cosas muy importantes» para él «a la hora de tomar una decisión».
También se refirió al hecho de que vaya a estar de nuevo a las órdenes de su progenitor, que ya lo dirigió en sus etapas en el Real Madrid Castilla y el Getafe.
«Mi padre siempre ha sido para mí un apoyo muy importante en lo personal y ahora lo tendrá que ver con otros ojos», subrayó el madrileño, de 29 años.
Sobre la demarcación que prefiere ocupar en el campo, el nuevo refuerzo del Málaga indicó que siempre se ha «sentido más cómodo por detrás del delantero», aunque precisó que también ha jugado «en varias posiciones» y ha «rendido a buen nivel», si bien admitió que el puesto en el que más se divierte «es por detrás del delantero».
Adrián señaló que cree que su «adaptación va a ser fácil y buena», ya que conoce a varios de sus nuevos compañeros, en especial a su «amigo» Keko Gontán, con el que coincidió en su primer año en el Eibar y con quien tiene «una relación muy buena», así como al defensa Luis Hernández, también exmadridista, y a José Recio.
Recalcó que el objetivo en lo colectivo es «intentar mejorar lo de la temporada pasada», pues sería «positivo quedar entre los diez primeros», pero sobre todo «crecer», mientras que en lo personal también pretende tratar de «superar los números del año pasado».
«Me siento hombre de club, puedo ayudar en otras facetas que no son el fútbol», aseveró el centrocampista, formado en el Real Madrid y que las dos últimas campañas disputó 60 partidos de Liga con el Eibar en los que marcó once goles.
Además, también militó en el Celta de Vigo, Nàstic de Tarragona, Getafe, Racing de Santander, Rayo Vallecano y Elche.
