La gran competición del fútbol latinoamericano ya se encuentra en la segunda ronda de la fase de grupos y lo que más a sorprendido en esta primera parte del torneo no son los resultados o los grandes jugadores, sino la falta de aficionados.
Si ahora puedes ver los partidos desde donde sea que estés, también puedes ver las gradas vacías en los estadios de Brasil en tus redes, por televisión o desde el mismo estadio. La situación a llevado al presidente de la CONMEBOL a declarar su preocupación ante esto; y es que de los partidos realizados solo dos han logrado tener más de un tercio del estadio ocupado por fanáticos.
Los enormes estadios construidos o remodelados para lo que fue el Mundial en el 2014 tienen enormes capacidades de público, que oscilan entre los 49 000 y los 87 000 espectadores, que no son posibles igualar con la cantidad de espectadores que asisten a la Copa América. Y no solo es la grandeza de los estadios sino el precio de las boletas lo que puede estar causando estos huecos.
Con un boleto rondando los 125 dólares, que equivalen a la mitad del salario mínimo en Brasil; y el poco orden en logística y organización para lo que es la recolección de los boletos, que en casos implican filas de 2 horas, esta edición obtiene la peor tasa de ocupación en una primera ronda (41,7%) en las últimas cuatro ediciones.
A pesar de esto, hasta el momento el balance de recaudación para la CONMEBOL es bastante bueno, habiendo recaudado casi 6 millones de dólares solo en el partido inaugural en el Morumbí.
Estos son la cantidad de aficionados que asistieron a los partidos de la primera ronda:
- Brasil- Bolivia: 47.260 espectadores
- Venezuela – Perú: 13.370 espectadores
- Argentina – Colombia: 35.572 espectadores
- Paraguay – Qatar: 19.162 espectadores
- Uruguay – Ecuador: 13.611 espectadores
- Japón – Chile: 23.253 espectadores
