Mientras que la institución planea derrumbar el San Siro y construir un nuevo estadio, el TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) sanciona al club por una violación de los parámetros del fair play financiero que se dio en los trenios de 2014-2017 y 2015-2018, de la que se los encontró culpables.
La sanción llega después de dos apelaciones previas por parte del Milan, ambas exitosas; y aleja al club, que había quedado en quinto lugar en la Serie A, de su participación en la Europa League en la temporada 2019-2020.
La institución lanzó este viernes 28 de junio un comunicado en el que expresan que han aceptado «voluntariamente» su exclusión, explicando que las irregularidades financieras se dieron con el anterior fondo al que pertenecían, un consorcio chino representado por Li YongHong; y que el actual accionista mayoritario, el fondo estadounidense «Elliott»; heredó notables perdidas y deudas tras su unión al club en el verano de 2018.
El club dejó en claro su apoyo al juego limpio financiero y que aunque lamenta que los aficionados no verán a su club en la competición, esto es lo que tenia que hacerse, mencionando: «Con gran decepción por el hecho de que nuestros aficionados no podrán ver a su equipo en la Liga Europa, el club reconoce y respeta el Juego Limpio Financiero. No hay otra opción que aceptar las sanciones para comenzar un camino para regresar al total respeto de las reglas».
Con el Milan intentando volver a su pasado estatus y reivindicarse por lo hecho, es el Roma, que había obtenido el sexto lugar en la liga italiana; el que accederá a la competición europea.
