Lanús volvió a tocar el cielo continental. En una final dramática, intensa y con pulsaciones al límite, el Granate derrotó por penales al Atlético Mineiro y conquistó la Copa Sudamericana por segunda vez en su historia, once años después de aquella consagración de 2013.
El partido terminó 0-0 tras 120 minutos de tensión pura, pero la gloria llegó desde los once pasos. Ahí, el protagonista absoluto fue Nahuel Losada, convertido en héroe granate con tres atajadas monumentales ante los remates de Hulk, Biel y Vitor Hugo. Una actuación de película.

“Es una emoción muy grande, estoy feliz. Fue una final dura, pero fuimos mejores”, dijo un Losada todavía vibrando de adrenalina.
🔥 Una tanda para el infarto

Lanús convirtió cinco de sus siete ejecuciones gracias a Carlos Izquierdoz, Sasha Marcich, Dylan Aquino, Agustín Cardozo y Franco Watson. Fallaron Walter Bou y el histórico Lautaro “Laucha” Acosta, quien vivió la final más emotiva de su carrera.
“Se me vino el mundo encima con el penal errado, pero mis compañeros me defendieron. Este grupo es el broche de oro, el final soñado”, confesó Acosta, que a sus 37 años disputa sus últimos partidos como profesional.
Del lado brasileño anotaron Gustavo Scarpa, Igor Gomes, Everson y Alexsander, pero la figura de Losada fue demasiado grande para el Mineiro.
🏆 Lanús entra al club de los bicampeones

Con esta conquista, el Granate se une al selecto grupo de equipos que han levantado la Sudamericana en dos ocasiones: Liga de Quito, Boca Juniors, Independiente, Athletico Paranaense e Independiente del Valle.
El título devuelve a Lanús al mapa grande del continente y confirma el valor de un equipo que supo sufrir, resistir y ganar como manda la historia granate.