Málaga, 3 dic (EFE).- El presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP), Javier Tebas, aseguró este jueves que «el Málaga estuvo a punto de descender porque no podía pagar a los jugadores» y que si el club no se «hubiera saneado, hubiera caído».
«Se fueron buenos futbolistas, pero se salvó la institución», indicó Tebas, ya que se había seguido una «estrategia equivocada de endeudamiento feroz», por lo que la LFP tuvo «multitud de reuniones» con Vicente Casado y Manuel Novo, entonces directores general y financiero del club, respectivamente, a los que dijo que «hay que ponerles una medalla».
El pasado sábado, el Málaga anunció la rescisión del contrato a Casado, a quien el propietario del club, el jeque Abdullah Al-Thani, ha acusado de haber llevado a cabo como director general, «sin información previa ni autorización», una subida «desorbitada» de retribuciones salariales» a directivos de la entidad.
En un coloquio organizado por el Diario Sur, el presidente de la LFP se refirió a estos últimos acontecimientos vividos en el Málaga y afirmó que le «preocupa que no siga el director de un equipo gestor que ha salvado al club de su desaparición», en referencia al destituido director general, Vicente Casado.
«Me preocupa el devenir de los hechos y no sé si es normal que a un director general se le eche tras un partido», el de la pasada jornada frente al Granada, subrayó Tebas, al entender que a los directores generales «no se les cesa así».
Elogió a Casado y a su equipo de trabajo, y además de sostener que «a lo mejor no hay un criterio muy coherente», añadió que respeta «las decisiones de los consejos», pero «hay fórmulas que te determinan si esa decisión ha sido meditada».
«La salida de una persona que ha hecho una gestión impecable con la deuda y la forma en la que ha salido me preocupa», insistió el dirigente de la LFP, que indicó que no podría decir que está «feliz» tras esa medida, si bien matizó que hay que «darle tiempo a la decisión y a la gente nueva que ha llegado».
En cuanto a los fondos de inversión, el Málaga tiene varios jugadores cuyos derechos pertenecen a uno de ellos con domicilio en Panamá, y en este asunto Tebas dijo que estos instrumentos «benefician a los equipos pequeños y medianos para mantener al jugador en tu equipo».
También se refirió al límite salarial del club malaguista, que posee 900.000 euros para poder fichar a partir de enero cuando se abra el periodo de contrataciones, y advirtió de que «si quieren más, tendrán que vender, invertir, ampliar capital».
«Que luego no digan que la Liga no permite fichar. Si lo hacemos así es en aras a conseguir una competición legal», concluyó.
