La lucha por revivir el ascenso y descenso en el fútbol mexicano ha dado un giro internacional. Diez equipos de la Liga Expansión MX han presentado una apelación formal ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) para exigir el regreso del sistema de promoción a la Liga MX, que fue suspendido desde la temporada 2019-2020.
Entre los equipos inconformes destaca el histórico Atlante, fundado en 1918 y campeón de liga en dos ocasiones. Desde su descenso en 2014, los Potros de Hierro han conquistado tres títulos de segunda división sin que ello les haya dado derecho a subir de categoría. Junto a ellos, otros clubes tradicionales como Atlético Morelia, Leones Negros, Mineros de Zacatecas, Cimarrones, Cancún FC, Atlético La Paz, Venados de Mérida, Alebrijes de Oaxaca y Jaiba Brava se han unido en esta cruzada legal.
¿Qué reclaman los clubes?
🚨🇲🇽 CONFIRMED: 10 Liga de Expansion (2nd division) clubs have filed a claim with the Court of Arbitration for Sport against Liga MX and FMF.
— All Fútbol MX 🇲🇽 (@AllFutbolMX) May 21, 2025
The clubs are demanding the return of PROMOTION and RELEGATION next season! 🤯 pic.twitter.com/oCqIFiUgak
La raíz del conflicto está en un documento oficial emitido por la Federación Mexicana de Fútbol (FMF), en el que se estableció la suspensión del ascenso y descenso hasta el año 2026, bajo el argumento de consolidar estructural y financieramente a los clubes del Ascenso MX.
Sin embargo, los equipos señalan que dicha medida nunca fue planteada como definitiva, y acusan a la FMF de no ofrecer claridad rumbo al supuesto reinicio del sistema de competencia. Según los directivos, el silencio de la federación ante la cercanía de 2026 genera incertidumbre y viola los principios de equidad deportiva.
¿Qué dice el TAS?
El TAS (Tribunal Arbitral del Deporte) aún no ha fijado una fecha para la audiencia del caso, pero ha confirmado la recepción de la apelación. Por su parte, la FMF ha evitado hacer comentarios al respecto, argumentando que no ha sido notificada oficialmente.
Un modelo económico cuestionado
Cada equipo del Ascenso MX recibe 845 mil dólares anuales como apoyo por parte de la federación. Adicionalmente, los tres últimos lugares de la tabla general deben pagar entre todos 8 millones de dólares, que se reparten entre los clubes como incentivo financiero. Para los dirigentes inconformes, este modelo es insuficiente y obsoleto, pues no contempla la inflación ni las nuevas exigencias operativas.
¿Qué sigue?
Con el Mundial 2026 a la vuelta de la esquina y la necesidad de mejorar el nivel competitivo del fútbol mexicano, el caso podría marcar un precedente sobre la viabilidad de retomar el ascenso y descenso como parte de una reforma profunda del balompié nacional.
¿Se hará justicia deportiva o quedará todo en promesas rotas? La última palabra la tendrá el TAS, pero los clubes ya han dejado claro que la paciencia se agotó.
