Sevilla, 17 dic (EFE).- El extremo del Real Betis Joaquín Sánchez afirmó hoy que, a pesar de lleva varios días trabajando al margen del grupo «por unas molestias en el cuádriceps», jugará el derbi del sábado ante el Sevilla, en el Benito Villamarín, ya que «estos partidos no se los quiere perder nadie».
En declaraciones a los periodistas, Joaquín reveló que este jueves se ha «probado en el entrenamiento», en el que ha «dado un pase adelante», por lo que cree que el viernes podrá unirse «ya al el grupo con normalidad» de cara a un encuentro en el que debe «dar el cien por cien».
El jugador de El Puerto de Santa María (Cádiz) regresó este verano al equipo en el que se formó procedente del Fiorentina italiano y, desde su marcha del club verdiblanco, el Betis no ha ganado ni un solo derbi en casa.
En este sentido, Joaquín recalcó que «afortunadamente» él sí sabe lo que es derrotar al Sevilla en el Villamarín, razón por la que afronta este «partido tan especial para todos con la ilusión de ganarlo», pero sin «motivación extra porque no hace falta».
El extremo portuense subrayó que tratará, eso sí, «de explicarle cómo es esto a los compañeros que no lo han vivido», si bien para él la rivalidad «se queda en los noventa minutos» porque no tiene «problemas con ningún sevillista» e incluso mantiene «una amistad extraordinaria con (José Antonio) Reyes».
No se atrevió a pronosticar un resultado, porque recordó que «no hay favoritos en estos partidos», pero su «deseo es que el Betis gane, que disfrute la gente y luego todo el mundo tenga unas buenas vacaciones».
