(Liga MX staff comunicación).-Querétaro y Morelia tuvieron un juego trillado que desató algunas tarjetas amarillas. Ambos cuadros parecían tener adrenalina acumulada, peleaban cada bola como si fuera la última.
Era un balance, estaba muy equitativas las oportunidades frente al marco, no había un dueño absoluto de la bola a pesar de que el tiempo transcurría; no parecía haber un cambio.
Ni las modificaciones que hicieron Pablo Marini y Víctor Manuel Vucetich pudieron inclinar el marcador a su favor. Ambas defensas se comportaron, no dejaron pasar a ningún elemento de la ofensiva rival.
En la segunda mitad, la propuesta purépecha era más notoria. El ingreso de Cristian Penilla fue útil para dar un poco de dinamismo; hizo algunos centros e intervenciones que pusieron en peligro el arco de Gallos.
Tiago Volpi fue capaz de evitar toda insistencia de Morelia. Incluso, hizo una gran atajada que evitó la caída de su marco. El arquero se estiró todo lo que pudo, sacó el esférico del ángulo inferior derecho dándole espectáculo a la tribuna que presenció el encuentro.
El resultado de este partido dejó a Querétaro con un punto en la tabla general; por otro lado, los michoacanos alcanzaron las cuatro unidades.
